Seguramente no haga falta una gran presentación a la hora de hablar del caso Gowex y su ya ex presidente Jenaro García o como algunos lo han apodado ya, el lobo del MAB. En resumidas cuentas se trata de una persona que ha conseguido engañar con las cuentas de su empresa y durante dos años a todo el sistema bursátil español. Se trata de una estafa a gran escala que sin lugar a dudas tiene una repercusión mayúscula en temas de reputación en más ámbitos de los que a priori se podrían prever:
- MAB: Muchos inversores han salido del MAB pues la confianza que genera ahora mismo invertir en dicho mercado es nula. La situación es tal que hasta empresas que cotizaban en dicho mercado alternativo bursátil han huido despavoridas para evitar un posible contagio de pánico.
- Reguladores: Nadie se explica todavía como ni el Mercado Alternativo Bursátil (MAB) ni la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) no tenían ni la más mínima sospecha ni detectaban alguna irregularidad. Se supone que en estos organismos reguladores deben estar los mejores profesionales pero una vez más da la sensación de que hay mucho amigo colocado que no se sabe muy bien cuál es su papel.
- Auditores: Una empresa auditora de Londres consigue detallar un informe con todo lujo de detalles y el auditor no. Durante 4 años Gowex ha estado falseando sus cuentas sin el más mínimo problema. El sector de la auditoría, que no es económico precisamente, tiene motivos para agachar la cabeza.
- Sector tecnológico: España a pesar de las dificultades es un país donde los emprendedores y start-ups tecnológicas son comunes y donde nacen una gran cantidad de buenas ideas. Sin embargo, esto supone un nuevo palo en todos los sentidos pues Gowex era el ejemplo de empresa tecnológica de origen español, innovadora y que conseguía crecer gracias a la financiación del MAB. Este gran ejemplo, ha quedado tirado por tierra generando una gran desconfianza.
- Gowex: Por supuesto y en última instancia, la reputación de Gowex está por los suelos y es insalvable. Lo peor de todo son sus trabajadores que no tienen culpa de nada y es que Gowex puede no ser la gran empresa tecnológica con contratos millonarios en todo el mundo, pero podría ser una pequeña startu-up que operara a su nivel ofreciendo Wi-Fi allá donde fuera necesario. Una lástima.