Estar por estar en redes sociales es uno de los mayores errores que cualquier empresa puede cometer en su estrategia social, aunque seguramente si se toma esta decisión, es porque probablemente esta ni exista. Uno de los motivos por los cuales tomar esta decisión es un error es porque afecta de forma directa y considerable a la reputación online de la empresa. No hay peor imagen que pueda dar una empresa en internet que la de tener abandonados sus distintos perfiles sociales. Daña la imagen de la empresa por sensación de dejadez y falta de profesionalidad además de que muchos usuarios pueden sentirse abandonados al no obtener respuesta.
¿En qué redes sociales me abro un perfil?
Si quieres proteger y trabajar tu reputación online es muy importante pensar previamente en que redes sociales se va a tener presencia y para ello, es recomendable tener en cuenta los siguientes puntos:
- Público objetivo: Detecta en que redes sociales tienen presencia tus clientes. No tiene sentido invertir tiempo y dinero en redes sociales donde los usuarios no están realmente interesados en tu producto. Si por ejemplo tienes un negocio de decoración o moda tal vez te interesa más estar en Pinterest que en otra red social. Aunque tenga menos usuarios, existe un gran público femenino y muy participativo.
- Recursos: Hay que tener en cuenta que no siempre es cuestión de querer sino también de poder. Las empresas cuentan con recursos limitados y hay que administrarlos por lo que deberás determinar el coste de tu estrategia social y el mantenimiento y gestión de cuantos perfiles sociales te puedes permitir.
- Prioridad: En función del número de redes sociales que seas capaz de mantener deberás elegir en cuál te interesa más estar presente. Tal vez tienes claro que por tu público objetivo deberías estar en 3 redes sociales, pero realmente sólo puedes permitirte gestionar 2, por lo que deberás priorizar.