Las primeras dudas que surgen entorno a las empresas cuando se habla de redes sociales es si realmente es beneficioso tener presencia en ellas o no. Algunas consideran que no aportan los suficientes beneficios y otras ven grandes oportunidades, sin embargo no es el tema de debate de este post. Supongamos el caso en el que una empresa o marca ha tomado la decisión de tener presencia en redes sociales. Una vez en este escenario, alguien tendrá que encargarse de ello por lo tanto, ¿necesita mi empresa un community manager?
El error del community manager en las empresas
Es muy habitual que cuando una empresa decide apostar por las redes sociales, lo hace sólo por su presencia pero no por una estrategia activa y elaborada. Para obtener beneficios en las redes sociales es necesario apostar e invertir por ellas y esto no es simplemente abrirse unos perfiles, es necesario trabajarlos en función de una estrategia, con una persona responsable.
Para ahorrar costes, generalmente se recurre a algún trabajador interno, asignando estas tareas a algún departamento. Otra opción que se ve mucho sobre todo si la empresa es familiar es recurrir a algún joven de la familia para que vaya actualizando y poniendo «4 cosas» ya que «se manejan bien con internet y los ordenadores».
Publicar en redes sociales no es ser community manager y eso es algo que tiene que quedar claro ya. Si tuvieras que ver a unos clientes importantes para cerrar una venta o defender tu producto ante unos inversores, seguro que no dejarías la responsabilidad a ninguna de estas personas que hemos mencionado. Sin embargo, cuando se hace esto relacionado con las redes sociales, estás dejando la reputación online de tu empresa, toda su imagen y presencia en internet, en manos de gente inexperta. Por estos motivos, es importante contar con un community manager dentro de tu empresa o bien subcontratar los servicios de una agencia especializada.