No compartas sin leer, tu reputación online está en juego

Hoy en día parece que vivimos a una velocidad superior a la que podemos soportar. Todo son prisas, todo tiene que ser para ayer y eso provoca que muchas veces realizamos ciertos actos de manera prácticamente automática. Automatizar ciertos hábitos está bien, el problema es cuando descuidamos detalles que a priori pueden ser absurdos pero que pueden jugarnos una mala pasada.

Compartir sin leer un post, la importancia del titular

Hagamos autocrítica y seamos sinceros, ¿cuántas veces has hecho retweet a un post leyendo sólo el titular?. Seguramente el 99% de los que acabéis leyendo este post reconoceréis que lo habéis hecho en alguna ocasión. Cada vez es más común estar por Twitter u otra red social, leer un titular que nos atrae, pensar que el contenido va a ser atractivo y compartirlo, no hay tiempo para más.

Generalmente si lo haces es porque has decidido confiar en que el contenido será decente y si quien lo ha compartido previamente es un medio o una persona influyente que conoces, pues todavía confiamos más. Sin embargo, cada vez que compartimos algo en redes sociales, debemos ser conscientes que estamos compartiendo una parte de nosotros, de nuestra forma de pensar.

Tal vez el titular de un post puede ser muy atractivo, pero luego en el contenido realiza una reflexión, comentarios o ataca algún aspecto que puede ir en contra de lo que nosotros realmente pensamos. Si ya de normal, debemos ser muy cuidadosos de lo que compartimos en las redes sociales, compartir sin saber realmente lo que estamos compartiendo es jugar con fuego y muy altas probabilidades de quemarte.

Si de verdad quieres cuidar tu reputación online, quieres reflejar exactamente tu postura en determinados temas con tus fans y no quieres sorpresas, se consecuente con lo que compartes. Más vale compartir menos y acertado que compartir mucho sin saber realmente que imagen de nosotros estamos ofreciendo.