Recientemente hemos conocido la noticia de otra influencer que dejaba las redes sociales por motivos negativos. Se trata de la célebre española Dulceida, que argumentaba problemas de salud mental a raíz del acoso sufrido en las plataformas.
No es ninguna novedad y tampoco va a ser la última famosa en redes sociales que las abandona, pero sí que nos permite aprovechar la situación para analizar en qué lugar queda la reputación online de estos profesionales cuando dejan su medio de trabajo.
Empatía entre los seguidores
Cuando los motivos de que un influencer ha dejado una red social están relacionados con acoso de otros usuarios, se incentiva la empatía con sus seguidores.
Es lo mismo que sucede con una marca que construye bien su reputación online. Al haber creado una comunidad afín a ese perfil, cualquier ataque externo es pronto rebatido por quienes más defienden a su ídolo.
Paradójicamente, con la acción de abandonar la red social los perfiles consiguen más usuarios, pero esto no debe llevar a la estrategia errónea de hacer falsas amenazas.
Algunos influencers anuncian su despedida próxima de las redes sociales, con el fin de conseguir atraer más seguidores y luego permanecen con alguna excusa no demasiado firme o incluso sin argumentarlo en absoluto.
Desinterés de los anunciantes
La marcha de una red social supone decir adiós a una línea de negocio, por lo que los anunciantes no ven con buenos ojos estas acciones.
En los contratos con influencers se establecen fechas de publicación y de compromiso, sin embargo cualquier perfil desaparecido implica decir adiós a la presencia de una campaña por la que se suele invertir bastante.
Una futura vuelta de ese mismo influencer no va a tener fácil convencer a las marcas de nuevo, dado que temerán que se vuelva a producir la desaparición de la red social por un problema de estrés, acoso o similar.
Malo para el influencer y arriesgado para el anunciante, lo que muchas veces conlleva no seguir con más campañas entre ambas partes.
Influencer que abandona tras polémica
La peor situación para la reputación online de un influencer es abandonar por una acción propia que ha desatado polémica.
Muchos influencers no aprovechan servicios de asesoramiento profesional en social media, con lo que inevitablemente terminan realizando acciones que conllevan una polémica con sus seguidores y/o con otros usuarios.
El abandono es el reflejo de la imposibilidad de gestionar bien la crisis de reputación online, con lo que todo su potencial en redes sociales queda en entredicho o desaparece, así como también puede verse afectada su trayectoria profesional.