Este tema de las cuentas falsas para aumentar las crisis de reputación de otras empresas del sector está de actualidad. Son varias las empresas que se han acusado entre ellas y afirman que sus rivales les están atacando en cuanto ven una crítica hacia su marca.
Según estas empresas, en el caso de que alguien critique o se queje de algún producto, automáticamente aparecen varias cuentas de Twitter supuestamente falsas que retuitean la crítica, avivan el fuego y ayudan a que esta crisis de reputación online llegue a más gente.
Detectar una cuenta falsa es relativamente sencillo. Lo normal es que no tengan foto o la foto no sea la de una persona normal. Suele ser un icono o una foto comprada en un banco de imágenes. Además, la cuenta falsa no tuitea información personal y sólo hace retweets o publica enlaces de forma automática. Y como no, publica cuando hay una crítica a otras empresas de la competencia.
Pues bien, son varias las voces que están denunciando la creación de estas cuentas falsas para hacer daño a la competencia. Personalmente me parece que no es el mecanismo correcto «pisar» a otra empresa para salir beneficiada. De hecho, esta técnica me parece que es utilizada por los community managers de estas empresas para subirse el ego. No veo a los grandes directivos lanzando estrategias de creación de cuentas falsas para perjudicar a las empresas de la competencia.
En el caso de que seamos nosotros los que nos vemos atacados por cuentas falsas, lo mejor que podemos hacer es identificar las cuentas y no responder si pensamos que es una cuenta falsa para no avivar el fuego. Además también podemos contactar con Twitter para comunicarle lo sucedido e intentar que borren estas cuentas falsas para que se les quiten las ganas de volver a crearlas.